Primero que
nada, quiero enviarles un gran y afectuoso saludo a mis lectores y hermanos colombianos,
esta vez quiero hablar de un pedacito de su historia. Creo que si alguien
pregunta en Colombia quien fue Pablo Escobar vendrán a memoria muchos recuerdos
tristes, asesinatos, destrucción, intimidación, etc.
En lo
personal, si me lo preguntan, me considero una persona polifacética, me
intereso en muchos temas, económicos, políticos, históricos, en fin, en mi
lista de conocimientos se encuentra un poco de todo. Y viendo un poco hacia
atrás en esa época que vivió Colombia me di cuenta que hubo un hombre que
aunque no hizo grandes cosas como ser Ministro de Justicia como Rodrigo Lara
Bonilla o un precursor de un movimiento político como Luis Carlos Galán, hizo
grandes cosas con lo que mejor pudo hacer, hablo del Señor Guillermo Cano,
director del Diario El Espectador de ese tiempo. Investigando un poco acerca de
las muchas editoriales que el redacto me encontré con uno que me llamo la
atención, y se titulaba asi como se llama esta publicación, GALAN, EL GRAN
GANADOR.
Después de
las elecciones de ese año, Luis Carlos Galán, que recién hizo una campana corta
y con un movimiento político nuevo logro alcanzar una cantidad considerable de
votos a su favor, y aunque no pudo llegar a la presidencia de Colombia,
Guillermo Cano hablo de el como un ganador. Y tal vez para muchos esto les
parecerá un poco extraño, un hondureño hablando de un pedacito de la historia
colombiana, bueno, cuando leí esa editorial que don Guillermo Cano redacto, me
di cuenta que aunque no hagamos grandes cosas como ser presidentes o ministros,
podemos generar un impacto grande en nuestra nación y en las vidas de los que
nos rodean.
Yo creo que
cuando alguien que es una persona normal, que no se mete con nadie, que
solamente es un empleado, lee esto, lo primero que dice es ‘’como puedo yo con
mi trabajo o con lo que hago ser un agente de cambio para las
personas’’????????? Yo creo que el Señor Guillermo Cano sabia, que aunque no
era un súper héroe, él podía hacer algo con lo que mejor sabía hacer, ESCRIBIR.
Yo me
pregunto, estaremos los Hijos de Dios, conscientes que podemos ser un agente de
cambio para los que están a nuestro alrededor simplemente con lo que hacemos?
Tal vez solamente somos unos simples empleados, un barrendero, una aseadora, un
asesor de ventas, o simplemente un estudiante. Pero por muy pequeño que sea lo
que hagamos debemos darnos cuenta que nadie lo hace mejor que nosotros, es
importante que nos demos cuenta que en nuestro mundo hay siempre alguien que
nos mira, que ve en nosotros un factor motivador. Tal vez tu talento sea
cantar, cambia al mundo cantando, tal vez tu talento sea escribir, cambia el
mundo escribiendo, tal vez tu talento sea hablar en público, pues habla en público.
No importa lo que hagas, hazlo siempre con el firme propósito de saber que con
lo que haces puedes contribuir a un mundo mejor, aun cuando la gente no lo diga
abiertamente pero siempre hay algo en ti y en lo que haces que ha de ser un
agente motivador para la gente.
Ahora, traigámoslo
a la iglesia… Cuál es tu talento? Cantas, predicas, danzas, profetizas, das
clases a los niños o simplemente eres el hermano o hermana que da la bienvenida
en la puerta?
Oh Dios, no
nos damos cuenta que con lo que hacemos podemos cambiar muchas cosas no solo en
nuestras vidas, sino causar un impacto en las vidas de otros. Cuantas veces no
he escuchado esto: ‘’Cuando canta esa persona, siento una paz, Dios me
conforta’’ o ‘’Cuando ese hermano o esa hermana predican siento que es Dios
hablando’’ pero menospreciamos esos pequeños detalles que pueden hacer del día
de otra persona, un día mejor.
Cuentan por
ahí una anécdota, dicen que en una empresa de refrigeración todos los días
llegaban muchos empleados y que siempre había un guardia de seguridad en la
puerta, nadie cuando entraba saludaba al desapercibido guardia, solamente un
hombre se tomaba el costo de saludar, un día ese hombre se quedó encerrado en
uno de los refrigeradores y ya no había nadie que lo pudiera auxiliar, el
guardia al ver que el hombre todavía no salía de la empresa decidió ir en su
búsqueda, llegando a su auxilio en momento preciso. Pasaron los días y el hombre le pregunto al
guardia que porque había decidido ir a buscarle. El guardia con una sonrisa en
su rostros le dijo ‘’de todos los empleados que entran y salen de la empresa
todos los días, tu eres el único que cuando llega saluda y cuando sale se
despide y al ver que no habías salido pensé que algo te había pasado, y así
fue’’
Ves? Un
simple saludo puede cambiarle el día a alguien. No necesitas ser un Bill Gates
o un Carlos Slim para hacer grandes cosas por otros. Cambia el mundo con lo que
mejor sepas hacer, nunca desprecies lo que haces, no sabes cuantas cosas útiles
has aportado en la vida de otros, Guillermo Cano sabía que podía cambiar
el estado de las cosas con lo que mejor
sabía hacer, Escribir.
No saben
cuántos mensajes me llegan de personas que leen este blog y me dicen como les
ha ayudado Vida de Ministro, para mí es una satisfacción saber que con lo que
hago el Señor está transformando la vida de muchos… y me llena de placer saber
que tengo algo que ver en la vida de muchos alrededor del mundo…
Nunca
desprecies lo que haces por muy pequeño que sea, no sabes que esos pequeños
detalles que das se convierten en grandes gestos para otros…
En Jesús…
A. Mario R. Forgas
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